Moreno y Saavedra

por Alicia Bonilla
(continuando con la serie "Del 25 de Mayo al 9 de Julio")
Nota VI


Son un secreto a voces en Buenos Aires las reuniones en la jabonaría de Vieytes. Allí la nueva generación de criollos quiere establecer su impronta.

Ataulfo Pérez Aznar en su libro ¨Temas de Historia y Política Argentina¨ al hablar de las corrientes generacionales de la historia, traza una línea entre estos jóvenes y aquellos que proclamaron su ideario romántico en el Dogma Socialista y a estos con la generación innovadora y patricia que alrededor de 1870 defiende la democracia representativa y la cultura tradicional argentina frente a los hombres de la generación del 80. Sus temas ejes son LibertadLIBERTAD e INDEPENDENCIA.

Desde órganos de gobierno como El Consulado de Buenos Aires, dedicado al fomento del comercio brillantes abogados como Moreno y Belgrano defienden los derechos de los hacendados y las bondades del libre comercio aunque con la protección debida hacia aquellos productos de producción nacional.

Poderosos comerciantes como Saavedra se unirán a ellos no con la vista inmediata en una independencia sino, en la idea de los beneficios aportados por el ahora posible comercio con Inglaterra, en estos momentos aliada circunstancial de España contra Napoleón.

Pero, solo pasaran pocas horas para que en esa Junta surjan las divisiones.

Los morenistas ostentan en los primeros meses de la revolución un predominio en la acción de gobierno. Moreno aspira al dictado de una constitución ya que sin ella ¨es quimérica la felicidad que se nos prometa¨. Y piensa que es necesario elaborarla sobre la base de la experiencia histórica y de las ciencias políticas.

También sabían que la revolución no iba a ser pacíficamente aceptada por lo que es necesario comenzar a preparar un ejercito profesional que reemplace a las milicias de voluntarios surgidas a raíz de las invasiones. En octubre se dicta el Reglamento que organiza la carrera militar y en diciembre el Decreto de Supresión de Honores que traslada a toda la Junta la Comandancia Militar antes en cabeza de su presidente. Ambas medidas afectan directamente el poder militar de Saavedra.

Analizado el movimiento del 25 de mayo lo primero que sorprende es el carácter comunal de un acto que tendrá consecuencias para todo el territorio. Para comprenderlo es necesario analizar la institución Cabildo en la América Hispana.

El cabildo tiene sus raíces en la reconquista española donde el incipiente estado de los reinos que se iban formando a medida que se reconquistaba tierra al mora tenia como fin cumplir finalidades ético-religiosas, pero serán las comunidades locales las que encaren la tarea de gobierno. Así fueron trasladados a América y pese a que el tema de una organización federal basada en la autonomía del cabildo no fue algo que se planteara entre los revolucionarios de mayo los conflictos que se plantean a los nuevos gobiernos desde 1810 hasta 1821 en que se suprime la institución están siempre planteados en el seno del los Cabildos.

Es por ello que el mismo 25 se envía una circular a los cabildos del interior para que elijan representantes que llegados a Buenos Aires constituirían una asamblea cuyo objetivo será definir el rumbo de la revolución. Pero sin que medie explicación alguna dos días después sale una nueva circular con una leve pero importantísima diferencia. En esta, los diputados se integrarían a la Junta de gobierno postergándose de este modo posibles definiciones sobre la independencia.

¿Que sucedió en dos días? Dirá Halperin ¨Junto con el aprendizaje de la libertad, Buenos Aires comienza con el de la discordia¨.

Los diputados comienzan a llegar a Buenos Aires y su aspiracion es incorporarse inmediatamente al gobierno mientras en la ciudad comienza una caza de brujas de peninsulares de quienes se sospecha apoyan el gobierno realista surgido del otro lado del río. La Junta dicta la Resolución de diciembre que impide ocupar cargos civiles, militares o eclesiásticos a los peninsulares.

Saavedra al ver recortando su poder buscara enfrentar al secretario Moreno y encuentra su espacio de apoyo entre a los diputados que pugnan por incorporarse al gobierno y a los peninsulares descontentos por la resolución que decreta su expulsión. La pugna finaliza con la renuncia de Moreno que fallece poco tiempo después de camino a Europa.

¿La revolución retoma la política de la máscara?

¿Qué buscan los diputados al querer incorporarse a la Junta?

En primer lugar debemos pensar que muchos de ellos han sido elegidos por los mismos cabildos que hasta entonces habían jurado fidelidad al antiguo monarca depuesto.

También resulta importante analizar los lazos que desde la creación del virreinato reinan entre Buenos Aires y el resto de las ciudades. Las viejas y prestigiosas ciudades nunca vieron con buenos ojos que la novísima y poco prestigiosa ciudad puerto se pusiese a la cabeza del nuevo virreinato y verán por tanto en su incorporación al gobierno la oportunidad de quitarle a Buenos Aires el protagonismo.

Con la incorporación de estos diputados al gobierno estamos ante un nuevo órgano: la Junta Grande integrada ahora por veintidós miembros.

Pese a la política prudente referente a la independencia no es posible por mucho tiempo mantener esa mascara. Pronto será necesaria encarar la guerra ya prevista. El mensaje revolucionario debe ser sostenido en el interior por la fuerza de expediciones militares.

Saavedra encuentra la oportunidad de quitar del escenario de Buenos Aires a los morenistas.

Castelli será designado para dirigir la expedición que llevara la voz de la revolución al Norte, Belgrano al Paraguay y Paso a la Banda Oriental donde la situación se presenta muy difícil pues el Cabildo de Montevideo no reconoce a la Junta y comienza un movimiento secesionista en la otra margen del río.

Saavedra queda dominando la situación en Buenos Aires pero a merced de sus aliados los diputados del interior capitaneados por el cordobés Deán Funes, a los que apoyo en su intento de unirse al gobierno.

Los antiguos morenistan no se dan por derrotados, surgen tensiones entre la Junta y el cabildo de Buenos Aires, que pugna por un protagonismo. Recordemos que los miembros del cabildo son los vecinos, incluyendo en ellos tanto criollos como peninsulares. Su presión sobre el gobierno es tal que este vuelve a la medida antes repudiada por Saavedra de expulsar a los españoles que no presten obediencia al gobierno.

La caída de Montevideo en manos realistas tendió un peligroso puente con los opositores de Saavedra en Buenos Aires. Son ahora los morenistas que con el apoyo de los nuevos regimientos creados, uno de ellos La Estrella capitaneado por French amenazan el poder del presidente de la Junta Grande. Es este tal vez un episodio mas en esta lucha de poderes pero en el hay un acontecimiento que siempre me ha impactado: La del 5 y 6 de abril de 1811.

Esa noche el centro de la ciudad vio interrumpido su descanso por la llegada de un grupo de paisanos, dirigidos por los alcaldes de campaña (representantes en el cabildo de la zona rural allende las ciudades) Grigera y Campana, que ocupan la plaza mayor, hoy Plaza de Mayo.
La consigna de estos hombres, analfabetos, seminómadas, su principal ocupación es ir detrás del ganado cimarron que ante la ausencia de alambrado vaga por las pampas, sera la renuncia al gobierno de dos vocales morenistas y que en adelante sea el pueblo el que elija a los miembros del gobierno.

Si bien Saavedra siempre negó su participación en esta asonada popular resulta difícil pensar, dado el perfil de sus manifestantes, que la misma haya surgido espontáneamente del pueblo.
Limpia de opositores la Junta Grande capitaneada por Saavedra entre en una etapa de indefinición respecto de la independencia, proyecto que sera retomado solo con la llegada de San Martin.

1 comentarios:

raul dijo...

y....? adonde estan el item contenidos,pra entrar a ver las fotos de la famila que entrego la gente